La mayoría de las viviendas que se han revisado hasta ahora han obtenido unas certificaciones energéticas muy bajas. En general, la mayoría de las viviendas que se venden o alquilan en España consumen demasiada energía y generan muchas emisiones contaminantes. Aunque las viviendas pueden venderse o alquilarse sea cual sea su calificación, conocer en qué se diferencia una vivienda eficiente de otra que no lo es puede ser útil para los inquilinos y los futuros compradores.
La máxima calificación energética
En líneas generales, para que una vivienda obtenga la máxima calificación energética debe contar con los siguientes elementos:
Buen aislamiento: Los buenos aislamientos térmicos impiden que el frío y el calor entren en la vivienda, por lo que ahorran mucha calefacción y aire acondicionado. Los técnicos que revisan la vivienda tendrán en cuenta los aislamientos de muros y paredes, pero también los de las ventanas. Éstas deben ser herméticas y dejar pasar la luz natural.
Buena orientación: La orientación de la vivienda es importante para ahorrar energía. Una vivienda orientada al sur en un clima frío tendrá menos consumo energético porque aprovecha mejor la luz solar. En cambio, en los climas cálidos, la orientación norte permite ahorrar en refrigeración.
Buenos materiales: No todos los materiales son igual de eficientes energéticamente. Hay algunos, como los compuestos, que crean una cámara entre la fachada del edificio y las paredes del interior de la casa, lo que hace que el aislamiento sea mucho mayor. Aunque no son muy frecuentes en las viviendas antiguas, cada vez se incorporan más a las nuevas construcciones.
Equipos y calderas eficientes: Una vivienda con una calificación A dispone de equipos de calefacción y refrigeración muy eficientes, capaces de generar una sensación de confort en el interior de la vivienda sin consumir mucha energía. Una buena idea puede ser la instalación de una caldera de biomasa, que apenas genera contaminación y cuya instalación está subvencionada en muchas Comunidades Autónomas.
Iluminación led: Su consumo es muy inferior a los sistemas convencionales, así que su uso se valora mucho en las revisiones para obtener la certificación energética.